Isa y Tuso en busca del pueblo perdido
¿Recordáis que estábamos con la búsqueda de un pueblo tradicional chino auténtico y que ya nos quedaban pocas esperanzas de encontrarlo? Pues bien, parece que al final lo hemos encontrado! Aunque eso sí, forma parte de una ruta que incluye otros pueblos y hay que pagar 35 yuanes de tasa turística para acceder a él. ¿os es que os creéis que los chinos son tontos?, jeje.
El citado pueblo se llama Chuandixia y se encuentra a unos 90 Kms de Pekín. Para llegar a él hay que bajarse en la última parada de metro de la línea 1 hacia el Este (Pinguoyan) y coger el autobús 929 o 892, que suele pasar a las 7:30 y a las 12:30.Cuando llegamos a la parada nos encontramos a varios taxistas que nos ofrecían ir y venir por 150 RMB, que no está nada mal, insistiendo en que no había autobús. Nuestra intención era pasar la noche allí y negociando negociando estuvimos a punto de ir en un taxi que nos llevaba directamente al pueblo por 60 yuanes. Pero en ese momento apareció otra pareja de guiris y el taxista se lanzó rápidamente sobre ellos para ver si nos podía llevar a los cuatro y sacar mayor tajada (porque aquí cobran por persona en lugar de por viaje).
Pero el pobre no sabía que había topado con un austriaco muy austriaco, al que no le sentó nada bien que le agobiara y le dijera que no había autobús. La chica era peruana peroya muy afincada en Inglaterra, por lo que se le había pegado la rectitud British. Nos hubiera salido genial la jugada pero finalmente apareció el autobús y decidimos subirnos. El trayecto son 16 yuanes por persona pero te deja en Zhonjan y allí hay que coger un taxi que no debe costar más de 20 yuanes. Al montarnos en el último taxi con la pareja austriaco peruana, el conductor nos insistía en que le compráramos a él los tickets de acceso al pueblo, que costaban 35 yuanes por persona. La insistencia era tal que deducimos que el negocio estaba en la venta de tickets. De hecho, al llegar al control y ver que le insistíamos en comprarlos en la taquilla oficial, incluso nos ofreció un descuento. Pero una vez más, el austriaco y la peruana se negaban a actuar fuera de la ley y acabamos comprando los tickets en la ventanilla. Eran muy majetes pero a mí me desesperaban un poco porque eran desconfiados al extremo. En cualquier caso, lo importante es que finalmente llegamos a Chuandixia, y mereció la pena!!
Se trata de una pequeña aldea que se extiende por la ladera de una pequeña colina y que es famosa por la buena conservación de sus 689 casas del estilo de las dinastías Ming y Qing. La mayoría de estas casas tienen la misma estructura: un patio interior alrededor del cual se sitúan todas las demás habitaciones, una de las cuales está habilitada para alojar a turistas. En la que elegimos nosotros para pasar la noche nos atendió una mujer muy amable y su hijo, aunque tuvimos algunos problemas de comunicación para decirle lo que queríamos de cena. Al final acabamos entrando en la cocina y señalándole a la buena mujer algunos ingredientes... y no salió mal la cosa. Nos preparó carne con pimientos, una tortilla de cebolleta y algo de arroz, riquísimo todo. Y allí en el patio estuvimos tan a gusto disfrutando del silencio y el fresquito de la noche con una cerveza bien fría.
La Gran Muralla
La Gran Muralla
Una vez en Pekín, la visita a la Gran Muralla es indispensable. La duda es qué tramo elegir. Badaling lo descartamos por ser la zona más turística. Nos habían hablado muy bien de Simatai, pero resulta que ahora estaba cerrado. El hostal donde nos alojábamos ofrecía una excursión organizada para hacer un trekking de 4 horas en Jinshanling que pintaba muy bien, pero había que tragarse muchas horas de coche para ir y venir. Varios amigos nos recomendaron visitar el tramo de Mutianyu, así que finalmente nos decantamos por éste.
Aunque se puede ir y venir en taxi por unos 400 RMB, ir en transporte público es bastante fácil y barato. Fuimos en metro hasta la estación de autobuses de Dongzhimen y allí cogimos el autobús número 867 hasta Huairou, donde hay que coger un taxi que te lleva ya hasta Mutianyu.
Una vez que llegas a la muralla, después de coger el telesférico hasta arriba de la montaña, el paisaje es espectacular. Lástima que el día no estaba despejado pero es impresionante ver cómo la muralla se pierde hasta el infinito serpenteando por las montañas e imaginar cómo los chinos se intentaban defender de los ataques del Imperio Mogol hace miles de años.
Recorrimos la muralla hacia un lado con una pendiente bastante seria y al final llegamos a un tramo que no ha sido restaurado, donde se puede observar cómo la naturaleza se ha ido comiendo el muro, como sucede en algunos templos de Angkor Wat. En total pasamos unas 4 horas andando por la muralla, donde por cierto no había demasiada gente, y disfrutando de las vistas que ofrece esta maravilla del mundo.
Bravo!!
ResponderEliminarMuy bonita esta esperiencia que cuentas, y realmente util me has ayudado mucho..
Si consigo reencontrar la web cuando vuelva del viaje te dejo un comentario diciendote como sigue este pequeño pueblo, ChuanDiXia.
Un Saludo!
Vaya, ¡me alegro de que te sirviese de ayuda! ;). ¿Estás de ruta por todo China? Por supuesto, si dejas algún comentario de tu experiencia será bienvenida.
ResponderEliminarSaludos y disfruta del viaje!!
Nostros vamos en junio y estamos decidiendo donde ir todavia. La info de estos dos sitios muy buena. Ya los teniamos apuntados para ir!
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